Aire

Cuantas cosas por hacer, cuantas que se han hecho ya. La lista es simplemente innumerable.
Han pasado ya algunos meses y he pospuesto algunas cosas, reuniones, charlas, inclusive a mi misma; estoy en un estado que no se como describir, es como si no estuviera dentro de mi, me encuentro lejos en un lugar donde la nada es todo y no hago nada, pero sin embargo físicamente sigo aquí, rodeada de papeles y sentada frente a la pantalla luminosa de esta lap top que se mueve ya junto conmigo a donde quiera que voy.

Es como un sueño de esos en los que no esta uno totalmente dormido y estas a punto de caer de la cama por el menor sobresalto, tengo infinidad de cosas que hacer, círculos que cerrar para pasar al siguiente nivel, pero me hallo lejos y distraida, aunque consiente de mi caos que ha perdido su orden en mi propio espacio, mi caos que ahora me devora y va hechando moneditas de estrés en la alcancía de mi cabeza.

Quisiera correr, pero algo me detiene, mis pies no se mueven, soy como una nube anclada a la tierra buscando la corriente adecuada de aire que me arranque de este sitio.